AITA, ESCRITOR

Hola Cuadrilla,
Hay un pequeño secreto en mi casa que muy poquitos conocéis. Nosotros tenemos unos buenos amigos que tienen un lugar mágico al que nos invitan para conocer y soñar, ese lugar se llama Libreria de Deusto / Deustuko Liburudenda.

Allí podréis conocer a Agueda y Josetxu que os aconsejarán sobre cualquier tipo de lectura. De vez en cuando veréis también a Carmen con su pelo colorido. Pero el secreto es que entre muchas otras cosas también te invitan a inventarte historias y escribirlas, por eso hace poquito organizaron un concurso de relatos cortos con un tema precioso, "volar". Mi aita que está un poco loco se animó a participar y parece que al jurado le gustó ¿qué opináis? A mi me parece muy gracioso. Muxus

Miedo a volar

No parece que éste sea mi último día. ¿Qué puede ocurrir? Estos cacharros son seguros. No hay que ser tan ridículo, soy una persona reflexiva y culta con un alto grado de autocontrol que además sabe que estadísticamente hablando estos aparatos son el medio de transporte más seguro; tiene menor índice de accidentes que los coches, trenes,… pero claro, si cae, caemos todos. Está bien, basta de paranoias, son 50 miserables minutos de Bilbao a Madrid. Antes de que comience a intoxicarme con la prensa estaré cruzando en un mugriento taxi esa horrible ciudad para asistir a una no menos horrible reunión.

Maldita sea! No le he dado un beso a mi niña antes de salir de casa. Y si no vuelvo a verla… La próxima vez voy en coche, me da igual lo que diga el inútil de mi jefe, o mejor, la próxima vez que vaya él a la dichosa charanga trimestral de comerciales zampabollos y que me haga un resumen a la vuelta.

Ya empiezo a sudar. No quisiera alarmar a nadie pero diría que están entrando demasiados pasajeros. ¿No será mucho peso? Veamos, unas 120 personas de unos 80 kilos de peso con equipaje incluido son… 9600 kilos!!!! Casi 10 toneladas, es imposible volar con tanto peso. Debería largarme. Joder!!! De ésta no salgo.

Voy a llamar a Nekane. Son las 7 de la mañana,… estará dormida. La llamo. “…Les rogamos apaguen los móviles y todos los dispositivos electrónicos hasta nuevo aviso…”. Demasiado tarde. Bueno, cálmate, tranquilízate, piensa en positivo, busca el nirvana, auuhmmmmm. Noooooo!!! Esto empieza a moverse!! Tengo nauseas, voy a vomitar. No. Respira hondo y contrólate. “Disculpe, señor, se encuentra bien ¿desea un poco de agua?” Sonríe y contesta negativamente “Abróchese el cinturón, por favor” Si, claro, muchas gracias, me quedo más tranquilo con el cinturón puesto. Inspira, expira. Inspira, expira.

Creo que el borrego que se ha sentado a mi lado no ha parado de hablarme ni un segundo. Como se ríe el muy imbécil, no se da cuenta de que estoy a punto de sufrir una crisis de ansiedad y que puedo abrirle la cabeza con mi PDA.

Este armatoste se ha parado. Ahora empieza lo peor, acelera, acelera, acelera y…. AAAAAHHH!!!!.

Vaya, no me imaginaba la muerte tan oscura y cómoda. ¿Qué se oye? Vaya! La voz del borrego. “…¿coges mucho el avión? Yo al menos una vez a la semana y me encanta, bla bla bla …”. Será mejor que no abra los ojos. Me voy a hacer el dormido, con un poco de suerte se bajará en marcha del avión y me hará un favor.

“…les rogamos que se abrochen los cinturones…” Eeeeh!! Ya hemos llegado?!?! Vaya me he dormido. Esto es infernal, acaban de torturarnos con el despegue y ya quieren aterrizar! Puff, estoy empapado de sudor pero no tengo claro si es mío o del botarate que tengo al lado que de pequeño debió comer lengua, que palizas!! El aterrizaje es peor, siempre lo es. Una cosa es alejarte del suelo y otra muy distinta descender desde 9000 metros a 900 km/h en un amasijo de 200.000 kilos de hierros y cables. En fin, puedo estar orgulloso de mis 32 años de vida, al fin y al cabo he cumplido casi todos los objetivos que me marqué cuando tenía 15 años; no morir virgen, ver a U2 en concierto, viajar a Nueva York, ser más alto que mi padre,…, me queda ver a mi Athletic campeón de la Copa de Europa,…, lo dejaré para mi reencarnación.

Uffff! Ya bajamos! Me estoy meando…a quién pretendo engañar, me estoy cagando! Que cerca está el suelo!!! Amatxuuu!! Nooooooo!!!!!!!

Pipipipiiii! Pipipipiiii!

(Susurrando) “Iker. Ikeeer, cariño. Apaga el despertador y levántate o perderás el avión.”

Mierda! Creo que esperaré a que el Athletic gane una Copa de Europa.

Markos (22/05/2008)