domingo, 10 de julio de 2011

SAN JUAN EN URBAN (I)

Tenemos la suerte de vivir en un barrio genial.
Desde hace unos años en el barrio de Urban Galindo celebramos San Juan de una manera especial.
Este año preparamos una fiesta por todo lo alto y el día nos acompañó.
Por la mañana hubo un recorrido de bicis por el bidegorri para los más peques y no tan peques.
A primera hora de la mañana se pudo ver alrededor de la Plaza del Desierto cómo se preparaban todos los participantes del concurso gastronómico de paellas, tortillas y bacalao para lo que iba a ser una jornada de mucho calor.
Carpas, gorras, bañadores, crema factor 50, refrescos, txakoli fresquito, todo valía contra el calor.
Los peques disfrutaron a media mañana de un baño de espuma.
Mientras tanto aitas y amatxus se afanaban por hacer una paella o una tortilla medianamente comestible. Como es evidente, no se nos ocurrió participar en el concurso de bacalao.
La Reina del Pollo Frito es Nerea que empezó muy fuerte y a la vista salta que lleva toda la vida friendo pollo.
Alberto o Maese Tortilla, como le gusta que le llamen, es el hombre que susurraba a las tortillas. Aquí le tenéis con Marta y Ana, sus discípulas.
Garbiñe se dió cuenta de que el asunto se nos iba de las manos así que tomó las riendas de la paellera y ordenó a Moisés y a Imanol que no dejasen que nadie se acercara a la paella. Salvo a Gaizka que es muy simpático.
Los de al lado tienen experiencia y dicen que tienen algún premio pero les vimos un poco faltos de coordinación.
El aspecto de la paella no presagiaba nada bueno...
...así que decidimos tomárnoslo con mucho humor. Alberto intentó susurrarle a la paella pero por lo visto su fuerte son las tortillas. La cara de Garbiñe lo dice todo "a mi niña no le doy de este mejunje". Adriana comprueba si en algún momento alguien ha encendido el fuego, Txetxu animándonos a tirarlo al contenedor, paellera incluida, y Nerea pensando en comerse los macarrones de los peques.
Menos mal que somos amiguetes.
A malas siempre nos quedan los estupendos pimientos de Aitor. Josean y Alberto luchan por no quemar los pimientos y sus dedos.
Decidimos dar de comer a los peques cantidades industriales de macarrones ya que nadie tenía claro que la paella fuese comestible.
Finalmente no nos pudo la verguenza ni el  miedo y presentamos nuestra paella y tortilla.
Ruth siempre tan positiva dijo que lo que no mata engorda así que todos a comerse la paella.
Finalmente nos sentamos todos y nadie resulto intoxicado. El año que viene mejoraremos.
Sobró poca comida y nada de alcohol. El txakoli y los pimientos volaron, vease Marta y Aitor.
Los Txetxus, Manus y compañía nos dieron a probar de su paella y la verdad es que estaba buena.
Las fuentes organizadoras calculan que estabamos unas 300 personas comiendo en los alrededores de la Plaza del Desierto.
Hacía tanto calor que los peques no tardaron en meterse en las fuentes del parque.
El día fue mucho más largo y en la próxima entrega os contaremos más.
Muxus

3 comentarios:

Amatxu dijo...

Muchísimas gracias a nuestro reportero por su magnífica crónica. Estamos deseando ver la siguiente entrega!!!

gallartónimo dijo...

El reportaje .....estupendo, pero quizás una invitación para el evento hubiese sido más .....no se....más "interesante"

Jone dijo...

Ok, tomamos nota. El año que viene invitaremos a nuestros vecinos de Gallarta ;-)