Los aitas y amatxus nos dimos un pequeño respiro. Para ello dejamos a todos los peques con aitites, amamas, osabas, izekos, vecinos o con quien sea para darnos un homenaje.
Las chicas se pusieron de lo mejorcito para lucir palmito por Bilbao.
Los chicos en cambio nos lo tenemos muy creido y con cualquier trapito vamos muy chulos sobre todo después de unas copas.
A principios de Diciembre el pobre Gaizka no respiraba bien y lo llevamos al hospital. Para nuestra sorpresa, se quedó ingresado y estuvo durante 5 días con oxigeno. Los niños aguantan muy bien estas cosas y son menos quejicas que los mayores pero Gaizka fue algo superior, se portó como un campeón y fue la sensación de los peques.
Aquí le tenéis con los tubitos de oxígeno que él mismo se colocaba cuando se le caían.